A la 1.30 de la madrugada de este domingo, la Policía intervino en una fiesta clandestina en la que participaban más de 300 personas, la cual se desarrollaba en un complejo ubicado en zona del Acceso Norte a Paraná.
Personal de Comisaria Séptima tomó intervención en la fiesta clandestina, para luego poner en conocimiento de la situación a inspectores de la dirección Habilitaciones de la Municipalidad de Paraná.
A su vez, la Fiscalía federal dispuso la suspensión el evento, por no ajustares a las disposiciones sanitarias vigentes para la prevención del coronavirus, y que se notificara de la infracción al organizador de la fiesta.
Además se ordenó el secuestro de luces, parlantes y demás elementos de sonido, según consignaron fuentes policiales.
A su vez, precisaron que la fiesta clandestina se realizaba en el complejo Parque Acuático Mar de Sueños, ubicado en la zona cercana al Acceso Norte a Paraná.